viernes, 19 de octubre de 2012

Responsabilidad social empresarial como modelo de gestión del negocio


A pesar de estar pasando por un período de crisis e incertidumbre económica, cada vez son más las empresas que optan por una visión de los negocios que incorpora a su gestión el respeto por los valores y principios éticos, las personas, la comunidad y el medio ambiente.
Es muy importante que desde la alta dirección exista un compromiso de un cambio en la cultura de la organización y con la construcción de confianza para con las partes interesadas, tanto internas como externas; y que se lleven adelante decisiones y actividades conducentes con: el desempeño ambiental sostenible, que sea económicamente viable y socialmente equitativo.
En función de llevar adelante este objetivo, las auditorías sociales son una herramienta que ayudarán a la organización a identificar su impacto social o ambiental, medir o evaluar repercusiones, comunicar interna o externamente su desempeño, y hacer mejoras permanentes en áreas tales como: la relación con la comunidad, prácticas laborales, asuntos de derechos humanos, responsabilidad ambiental, y conductas éticas.
Implementar programas de auditoría considerando la responsabilidad social empresaria (RSE) ayudará al negocio a tener un enfoque integral y a poder medir los aspectos no-financieros de su relación con la comunidad y otras actividades relacionadas, identificar requerimientos de información de los representantes de la comunidad, y determinar cuáles son las fortalezas y debilidades, para poder tomar decisiones estratégicas.
En cuanto a la labor del auditor interno, se debe tener presente que los programas de RSE deben auditarse y evaluarse como un todo, pero a su vez, los elementos del programa deben controlarse de manera separada, realizando auditorías separadas para cada elemento del programa.
También, pueden realizarse auditorías por agrupaciones de temas, como:
• Lugar de trabajo: elección de empleo, salud y seguridad, prácticas ambientales, diversidad e igualdad, ética, gobierno, derechos humanos.
• Marketplace: calidad de producto y seguridad, promoción responsable y ventas, administración responsable de la cadena de suministros, prácticas de desarrollo y prueba de productos, administración de productos, prácticas de revelación y privacidad.
• Ambiente: administración responsable de recursos (aire, agua, suelo, desperdicios, uso de energía, etc.), cumplimiento regulatorio.
• Comunidad: voluntariado, compromisos de/con grupos de interés, filantropía, negocios inclusivos, etc.
Finalmente, las auditorías sociales pueden ser muy valiosas para las empresas en tanto éstas entregan información sobre sus prácticas internas así como información sobre como los percibe la comunidad y sus representantes. Permitirán a la compañía mejorar su relación con los representantes de la comunidad y con los inversionistas, minimizar costos operativos, identificar impactos no financieros y prioridades, detectar debilidades en cuanto a obligaciones legales o estándares de calidad y evitar potenciales conflictos.
Fuente: por Gustavo Ríos, integrante de la Comisión directiva del Instituto de Auditores Internos de Argentina (IAIA).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.